Recogida del Lentisco 2008

Como cada año, la recogida del lentisco, es el chupinazo de salida de las fiestas de Navidad en nuestra hermandad. Es una tradición que se remonta a muchas generaciones antes de la nuestra. Para montar nuestro belén único, para celebrar nuestras "Jornaditas", es indispensable el verde que lo decora. Está compuesto en su mayor parte por lentisco, que se recoge al alba en el término municipal de Aznalcázar. La mayoría de nosotros conoce a muchos antepasados que participaban en este día y es el punto de partida de una tradición que con orgullo conservamos. A partir de ahora, sólo nos queda disfrutar de esos mágicos nueve dias en los cuales les explicamos el nacimiento de Cristo a nuestros hijos con nuestra Virgen de la Soledad. Así somos y seguiremos siendo.

Un mensaje de felicidad de todos los que participamos en este día.
Y la recogida terminó con la llegada a la parroquia de Castilleja para montar el portal.
Después de acabar con la recogida vino el tradicional desayuno con mosto y chacina.
Mi querido Antonio Gordillo, no suele faltar casi ningún año.
Su estreno este año, uno más a la familia, Joaquin.
Esta foto para que quede constancia que hasta Manolo trabajó duro.
Verdón acarreando lentisco.
Manolín y Juan Toro padre, dos de los clásicos en este ritual navideño.
Servidor en plena faena, un año más.
Ya en el tajo, recogiendo el lentisco de nuestro portal.
Las tradiciones como estas algunos las empiezan desde bien pequeños... Pablo y El Peli.
Enrique notaba más que paco el trasnochar.
La foto de familia al clarear la mañana.
Una saga en continuo, los Pedro Hernando.
Demasiado temprano, las caritas eran un auténtico poema.

Aunque algunos comían para combatir los efectos del agua de fuego..... ¿o no Jaime y José?

La primera parada a desayunar para coger fuerzas.

La V Operación Carretilla.

El pasado sábado 13 de Diciembre, sobre las diez de la mañana se puso en marcha la "V operación carretilla de la Hermandad de la Plaza". Como todos los años por estas fechas, es nuestra hermandad la que se pone el traje de faena y pide por los domicilios alimentos para todos aquellos hijos de Dios que lo pasan realmente mal, para los más desfavorecidos de nuestra sociedad. Los alimentos que se recogen son llevados hasta la sede de Cáritas parroquial que es la que se encarga de su distribución. Este año existía la novedad de incorporar al cortejo a nuestra banda de cornetas y tambores y, aunque las condiciones meteorológicas no nos hayan acompañado, su presencia se ha notado especialmente. En estas fechas, todos debemos de mirar un poco nuestro entorno y, como cristianos y cofrades intentar que estas fechas de paz, amor y felicidad sean para todos. La operación carretilla no debe de quedarse en un mero acto institucional sino que debe de ser uno de los pilares en los que nuestra corporación base sus obras de caridad. No debemos de quedarnos con los elogios, con el éxito de la recogida. Debemos y tenemos la obligación moral de incentivar e implementar proyectos propios. Se puede y se debe de mejorar para la edición del próximo año, con más personas dedicadas a llamar a las casas, con un recorrido más planificado y con la creación de puntos de recogida en determinados barrios alejados para facilitar su recogida. Estamos mejorando año tras año, pero la finalidad de este día debe ser tan importante como la de un Viernes Santo. Desde aquí también hay que dar las gracias al cuerpo de la policía local y al Ayuntamiento, por facilitar el trabajo de la recogida. A mi banda, a nuestra banda, felicitar a sus miembros no sólo por la calidad que cada día va adquiriendo, sino por aguantar estoicamente el frío, el agua que nos quiso acompañar durante todo el día. Aquí tenemos banda para rato, y además banda de nivel no solo musical y cofrade sino humano.

Una panorámica con todos los que participaron, mojados, cansados pero con un éxito difícil de superar por la cantidad de kilos de alimentos recogidos.

En el momento de cruzar la carretera de Huelva, hacia Dr. Fleming fue cuando más nos apretó el agua.

Un gesto cariñoso de servidor hacia los cuerpos y fuerzas de seguridad de Castilleja. Un trabajo excepcional de nuestros agentes, un abrazo a todos.

Aunque cayó mucha agua, no se perdió en todo momento el buen ambiente reinante.

Mi compadre Paco y Pepe, en la furgoneta de recogida de alimentos. El ex teniente Hno. Mayor hechó en falta al compañero del año pasado.....

Nuestro  Hermano Mayor cogió una "mojada" buena con su banda. !!Encomiable la actitud de sus componentes !!!
Cuando el agua aprieta, Francis cambió el banderín por un paraguas rojo..... Es como "Mary Poppins" versión plaza.
Aunque el tiempo no nos acompañó, no faltó nunca una parada para ejecutar una marcha. Frío y agua pero nadie se descompuso.
El presente y el futuro de la batería de tambores. 
Nuestro querido Curro, con el avituallamiento típico de estas fechas.
A su paso la comitiva por la calle Principe de Asturias, con Francis de banderín.
Un plano general de la batería de la banda, alma en esta edición de la operación carretila.
Todos colaboran desde temprano, había componentes de la banda desde las 8,30....las ganas.
A las diez de la mañana, en el momento en que se comenzó la tradicional operación carretilla desde nuestra casa hermandad.
Pedro Hernando junior, posando con el banderin de la banda de cornetas y tambores.